Artículo compartido por: Juan Pablo Aguilar Andrade
Las
primeras tarjetas entero postales circularon en el Ecuador a partir de febrero de 1884, y su uso fue oficializado al promulgarse el Reglamento del Servicio Postal Interno en junio de ese año. Inicialmente se hicieron dos emisiones, una en la Imprenta de
La Novedad y otra en la de V. Montoya, ambas compuestas por dos tarjetas, una de dos y otra de tres centavos.
Que había suficiente existencia de estas especies lo prueba el hecho de que siguieron usándose hasta inicios de los años noventa. No es claro, por eso, por qué el gobierno ecuatoriano encargó nuevas tarjetas de dos y tres centavos a la American Bank Note Company; ¿tal vez para que el diseño de las mismas estuviera de acuerdo con las regulaciones de la Unión Postal Universal?
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Las tarjetas de 2 y 3 centavos de la tercera emisión ecuatoriana, impresas por la American Bank Note Company |
Las tarjetas de esta tercera emisión ecuatoriana fueron una de dos centavos, en cartulina blanca, y otra de tres, en cartulina rosada; conforme las tarifas entonces vigentes, la primera debía usarse para el correo doméstico y la segunda para el internacional.
Como indica Georg Maier (Los Enteros Postales del Ecuador 1884-1957, Quito, 2014, p. 13), "ninguna de las tarjetas muestra características especiales, salvo una pequeña diferencia en el marco del diseño, que puede variar de 128 milímetros a 128,8 milímetros de ancho en los dos tipos. Donde sí existe una diferencia pronunciada es en el grosor del cartón, que varía entre 0,32 y 0,39 milímetros". Esto, sin embargo, según el mismo autor, no autoriza a hablar de diferentes tirajes.
No se ha encontrado ni una orden oficial de emisión ni el contrato de impresión, por lo que no sabemos ni las fechas exactas de circulación, ni el número de piezas emitidas.
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Texto del anuncio publicado en El Comercio, de Quito, el 12 de febrero de 1886 |
La primera referencia contemporánea a la existencia de las tarjetas de la American Bank apareció en la publicación francesa Le Timbre Posté, en el número de diciembre de 1885, donde se informa que entraron en circulación en octubre de ese año. También en diciembre, la existencia de las nuevas tarjetas fue dada a conocer en las páginas de The Philatelic Record.
El 12 de febrero de 1886, el diario El Comercio de Quito, anunció que las nuevas tarjetas postales llegadas desde los Estados Unidos se encuentran a la venta en el almacén de Rafael E. Dávila.
Las tarjetas de la American Bank tuvieron poco uso en sus primeros años, pues siguió recurriéndose a las de las dos primeras emisiones. Son bastante escasos los ejemplares fechados en el período inicial, volviéndose frecuentes las tarjetas a partir de 1889.
Es necesario establecer con claridad los usos más tempranos y los más antiguos de estas tarjetas. Solicitamos, para ello, el apoyo de nuestros lectores.