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Se me pide mi opinión sobre unas piezas postales de indudable interés y, en cualquier caso, de gran belleza.
La cuestión es si determinados documentos postales colombianos circulados deben incluirse dentro de lo que conocemos, filatélicamente, como ENTEROS POSTALES.
Lo primero es ser conscientes de que los llamados enteros postales responden a una definición filatélica convencional establecida, y comúnmente aceptada, por la FIP
En este sentido quiero recordar dos aspectos fundamentales de la definición oficial actual y que, en mi opinión, son los que nos incluyen o excluyen dentro del mundo de los enteros postales a los diferentes objetos que han circulado por el correo:
1.- que porten un sello o la indicación de que un servicio postal ha sido previamente pagado
2.- que las características del papel en el que se imprime el sello, o la indicación del pago previo, sean acordes a la utilización prevista y permita la inclusión de dirección, remite o lo que sea pertinente en cada caso.
En el caso de paquetes o de sobres cuya dimensión sea variable es útil la confección de etiquetas que se adhieren a dichos objetos. Es el caso de las etiquetas españolas de certificado de Impuesto de Naipes y de Impuesto de Timbre para el envío de paquetes desde o hacia la Fábrica Nacional de Moneda y timbre, las etiquetas de certificados sin derecho a indemnización para el envío de libros emitidas a petición de algunas editoriales españolas.
Ejemplos de los mismos aparecen en las figuras 1 y 2
Figura 1
1940 Cervantes. Entero postal administrativo (Impuesto de Timbre) circulado de Vitoria a Madrid del 24 al 25 de noviembre de 1943. Matasellos de Certificado de Vitoria y franquicia de la "ADMINISTRACIÓN ESPECIAL DE HACIENDA DE ÁLAVA" en el anverso y marca de llegada de certificado, apartado oficial de Madrid en el reverso. Único ejemplar conocido de enteros postales administrativos con este franqueo (40 cts.).(Col. José Manuel Rodríguez)
Figura 2
Etiqueta enteropostal de 50+2 cts. de la Matrona con doble numeración en rojo. Los 52 céntimos cubrían la tarifa de impresos y los derechos de Certificado y contrareembolso de 9 pesetas. Se utilizaba para ser adherida a una caja de cartón que contenía dos libros que la Editorial Alhambra enviaba mensualmente a sus suscriptores. Esta pieza es la única que se conoce completa en su estado original. (Col. Germán Baschwitz)
Los ejemplares que acabamos de mostrar son, evidentemente enteros postales y los uso como referencia para el análisis de las piezas colombianas que vamos a ver a continuación.
Certificación sin contenido;
( Col Arturo Ferrer)
Es una etiqueta que indica el pago del servicio de certificado, sin indicar el valor del contenido, es decir no incorpora el servicio de "valores declarados"
y Certificación con Contenido
(Col Arturo Ferrer)
Este si indica el pago del servicio de "valores declarados"
Ambos emitidos en 1865
Más emisiones de certificación con contenido
(Col Arturo Ferrer)
Emitido en 1867
(Col Arturo Ferrer)
Emitido en 1870
A continuación reproduzco ejemplares de otras emisiones, circulados.
Remitido de Bucaramanga (Santander) a Bogotá (Cundinamarca) el 13 de octubre de 1888. El sobre contenía 100 pesos. Ejemplar de la emisión de 1887/90 (número 9 del catálogo Higgins & Gage). (Col Arturo Ferrer).
Emisión del año 1890. Un peso (número 30 según el catálogo Higgins & Gage). Circulado desde Ocaña (Norte de Santander) de donde salió el día 22 de marzo de 1891 se entiende que a Bogotá. La única dirección que se utiliza para el destinatario es "Banco". Contenía un billete de cien pesos y como se puede ver en el impreso consta la serie y el numero del billete, también consta la firma del remitente. (Col. Arturo Ferrer)
"En ocasiones era necesario utilizar más de un impreso, ya que el importe era superior a lo abarcado en un solo efecto. Así es el caso de este doble impreso utilizado desde Popayan (Cauca), en julio de 1911 y remitido, claro está, a Bogotá. Ambos impresos pertenecen a la emisión de 1905 (número 41 de Higgins & Gage)." (Col. Arturo Ferrer)
Emisión 1892/93 (número 1 del catálogo Higgins & Gage). Utilización Popular. En este caso, el sobre que contenía 8 pesos y 40 centavos fue enviado desde Puerto Berrío (Antioquía) el día 30 de abril de 1896 a Antioquía, a donde llego el 16 de mayo de 1896 (matasellos de llegada al dorso) (Col. Arturo Ferrer).
Emisión del año 1905, por valor de cinco centavos (número 36 en el catálogo Higgins & Gage). Salió de Palmira (Valle del Cauca) el 28 de febrero de 1908 y llegó a Buga (Guadalajara de Buga, Valle del Cauca) sin matasellos de llegada, conteniendo en su interior quinientos pesos.( Col Arturo Ferrer)
Todas estas piezas responden a los criterios incluidos en la definición actual de enteros postales "que porten un sello o la indicación de que un servicio postal ha sido previamente pagado" y, en mi opinión, deben ser considerados como tales.
Caso aparte son otras piezas, circuladas, como las siguientes:
Primera "cubierta oficial" de los "Estados Unidos de Colombia". Año 1870. Este envío se realiza sobre un envuelto de papel, no sobre, el 5 de abril de 1867 desde Medellín. En este caso no se indica la cantidad material del envío, y parece remitido a la Administración Central de Bogotá. (Col. Arturo Ferrer)
"Certificado Oficial". Se imprimieron entre los años 1870 y 71. Salió de Ibagué (Tolima) el 3 de marzo de 1882 y va destinado también a Bogotá a un tal Eduardo Ochoa. Contenía 50 pesos. Destacan los lacres en las cuatro esquinas(Col. Arturo Ferrer).
"Certificado Oficial. Año 1886 (número 10 en el catálogo Higgins Gage). Salió de Cartagena de Indias (Bolívar) el 19 de abril de 1881 con destino a Popayán (Cauca). Contenía al parecer 17,82 1/2 $ -desconozco la cifra que aparece en la parte superior (col Arturo Ferrer)
Estas piezas, en mi opinión, son etiquetas administrativas de correo creadas para el correo oficial. Los envíos a los que iban adheridas, al ser oficiales, circularon con franquicia, es decir exentas de franqueo, consecuentemente no responden al criterio necesario para que las podamos considerar enteros postales de que "porten un sello o la indicación de que un servicio postal ha sido previamente pagado", por lo tanto, no lo son.
En cualquier caso, para mí es un placer analizar piezas postales que se muevan en "terrenos fronterizos" y que nos provoquen el placer de debatir si "son o no son".